El ventilador similar o precursor del que conocemos hoy, motor eléctrico con aspas que gira dentro de una caja o estructura que dirige un flujo continuo de aire en la dirección deseada, como tal aparece en 1886, y es un invento del estadounidense Schuyler Skaats Wheeler, que fue comercializado por su empresa Crocker & Wheeler, instalada en Nueva York. Era de pequeño tamaño y diseñado para ponerlo sobre una mesa. Casi simultáneamente apareció en Alemania una versión de techo creada por el ingeniero Philip Diehl.
Y el ultimo grito en materia de ventiladores, es un gadget en forma de ventilador para los smartphones. Son los así denominados “Ventiladores USB para móvil”. El dispositivo es simplemente un mini ventilador que se conecta al USB del móvil. Vamos a limitarnos a mostraros la fotografía y la descripción sobre sus características que hace una de las empresas que lo comercializan, en concreto Promotech, que afirma lo siguiente:
“Disfrute de un ventilador práctico. Como hoy en día tenemos que llevar con nosotros nuestros teléfonos móviles prácticamente en todo momento, ahora podrá disponer de un ventilador donde quiera que vaya. No se preocupare porque ello pueda suponer llevar un peso adicional; puede dejar una mano libre, ya que sólo necesita sostener el teléfono y no el ventilador adicionalmente en la otra mano.
No hace falta una toma de corriente adicional: este ventilador para teléfono móvil funciona directamente con la batería de su teléfono. No cargue ni canse sus manos sosteniendo un ventilador. Utilice este ventilador para teléfono móvil para variedad de ocasiones, como por ejemplo, cuando necesite secar pegamento.
Una vez tenga su teléfono conectado a este práctico ventilador, podrá dirigir el flujo de aire y elegir el ángulo y la posición del ventilador que se ajuste a sus necesidades, al igual que cuando usa su móvil. Cualquier lugar es ideal para usar este ventilador para su móvil como puede ser en el tren o el autobús, cuando camina o socializa o, de hecho, siempre que necesite aire fresco.
Es fácil dejar que el flujo de aire lo alcance para que Ud. se refresque sin ajustes complicados. No se requiere ninguna aplicación para hacer funcionar el ventilador, ya que es un simple dispositivo «plug & play»: simplemente conéctelo y disfrute del flujo de aire fresco”. Todo son ventajas y como se ve imprescindible para secar pegamento.
El segundo gadget de hoy es el “Egg Cuber” diseñado por SCI Cuisine International (Camarillo, California). Lo fabrican en China, y cuesta alrededor de 10 euros. Simplemente es un artilugio para obtener huevos cocidos cúbicos o con forma de cubo o como un dado de seis caras, como cada uno quiera definirlo.
Las proteínas de la clara de huevo se conocen generalmente como albúminas, y las hay de muchos tipos diferentes. Tienen en común que la mayor parte son proteínas globulares, es decir, que sus moléculas están enroscadas sobre ellas mismas formando unas hélices que se pliegan dando unos grumos o glóbulos, de donde les viene su nombre. El resto de la clara es agua, y poca cosa más. Equivale a una suspensión acuosa, con propiedades de líquido viscoso, que técnicamente se conoce como sol. La yema tiene una estructura similar, pero con una proporción elevada de grasas dispersas en forma de gotas, en el seno de la masa de agua y proteínas de la yema.
Cocer el huevo es desnaturalizar sus proteínas: es hacer que los glóbulos proteínicos se desenrollen. Las cadenas de proteína, inicialmente independientes las unas de las otras, se abren como spaghetti y se vuelven a enredar, ahora entre ellas formando una estructura similar a una esponja, que se conoce como gel, porque es similar a la estructura de la gelatina. Las moléculas de agua de la clara están unidas a las moléculas de proteína mediante enlaces químicos débiles, denominados puentes de hidrógeno, pero lo bastante fuertes como para que la estructura de la clara de huevo duro no pierda el agua cuando se la presiona.
Se pueden hacer huevos cúbicos si se dispone del utensilio oportuno. Se trata de una cápsula de metacrilato, de forma cúbica, con el fondo móvil y una tapa que se puede ir acercando al fondo enroscándola más o menos. Se hace un huevo duro normal, con cáscara, se pela, se coloca el huevo pelado en el utensilio, y se atornilla la tapa hasta que el huevo está totalmente chafado dentro del recipiente. El huevo duro, ya cocido, toma la forma del entorno, porque el gel caliente es una estructura flexible, y puede tomar (hasta cierto punto) la forma del recipiente que lo contiene. Con el huevo en el interior, se deposita en un refrigerador doméstico, a unos 6ºC, y al día siguiente se puede sacar el huevo duro cúbico, que mantiene su forma algunas horas. Es un objeto intrigante para los que no saben cómo se ha conseguido. Con el tiempo, este huevo duro cúbico va evolucionando hacia la forma esférica-ovoide, que es su forma espontánea.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!