En los dos gráficos que aparecen a continuación, se incluyen tanto las solicitudes directas de patentes presentadas en la Oficina de Patentes Europea (EPO), como las patentes internacionales (PCT) presentadas para su convalidación en la Oficina de Patentes Europea (EPO). Por su parte la leyenda correspondiente a ambos gráficos será:
EPO: Los 39 estados miembros de la Oficina Europea de Patentes (EPO), incluidos los 27 estados de la Unión Europea (UE) tras el Brexit.
US: Estados Unidos de Norteamérica. CN: República Popular de China
JP: Japón KR: República de Corea (Corea del Sur) Otros: Resto de países
A la izquierda de cada una de estas regiones o países se indica en rojo el porcentaje sobre el total en 2022.
Encima de cada año se indica el porcentaje de incremento/decremento anual, seguido de flecha ascendente verde si es incremento o flecha descendente roja si es decremento.
Para 2022 en rojo y en tamaño grande se indica el nº total de patentes presentadas en la EPO tanto Directas como PCT.
Como se observa en el gráfico superior, en 2022 el número total de patentes presentadas en la EPO asciende 193.460, habiéndose incrementado en un 2,5% con respecto al año anterior.
Con vistas a cinco años puede decirse que tras superar el efecto de la pandemia mundial por Covid-19, que en 2020 hizo que disminuyeran el número de patentes presentadas en un 0,6% y que en 2019 solo incrementara el 4%; en 2022 aunque hay crecimiento este es menor, solo del 2,5%. Probablemente debido a la guerra entre Rusia y Ucrania. Es decir, no se alcanza la tendencia previa en el que hay un incremento medio de alrededor de un 4,5% o superior, y nos quedamos prácticamente en la mitad, un dato por lo tanto bastante mediocre.
Si nos fijamos por regiones o países, los europeos (en el gráfico denominados EPO) aportan casi la mitad de las patentes presentadas en la EPO (43,4%), cosa de por si lógica al tratarse de una oficina europea. A continuación (con un 24,9%), y con un poco más de la mitad de las presentadas por los europeos tendríamos a la primera potencia económica del planeta, los Estados Unidos de Norteamérica; cosa también de esperar.
Llama mucho más la atención que en el tercer puesto siga resistiendo Japón con un 11,2% sin llegar aun a ser superado por China (9,8%); la potencia económica emergente, que es de esperar que lo supere en los próximos años.
También hay que destacar el caso de la República de Corea (comúnmente denominada Corea del Sur), que teniendo un tamaño demográfico y geográfico muy inferior a los cuatro países o regiones mencionados anteriormente, consigue encaramarse al quinto puesto con un muy meritorio 5,4%.
Por último reseñar que la aportación del resto de países del mundo, que son más de doscientos, es prácticamente anecdótica (5,4%), exactamente lo mismo que Corea. El juego se dirime entre EE.UU., Europa y la tripleta asiática, el resto del planeta son meras comparsas.
Si ampliamos el espectro a los diez últimos años, en vez de a los cinco últimos, tal y como hacemos en el gráfico situado encima de este párrafo; observamos que la tendencia se mantiene estable, más o menos en las mismas cifras.
Eso sí, con periódicas caídas (se podría muy bien caer en la tentación de indicar que debido a las crisis cíclicas del capitalismo, aunque lo dudo) cada dos o tres años (entre el -0.4% y el -0.6%).
En 2020 la ya reseñada crisis por el Covid, en 2016 la crisis por la caída del precio del petróleo por la sobreproducción iraní y en 2013 como el rebote financiero de la gran crisis del 2008 desencadenada con las hipotecas basura norteamericanas.
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